Cuando llega la primavera, dejamos atrás las bajas temperaturas y empezamos a enseñar más piel. Es cierto que muchas de nosotras hemos integrado en nuestro día a día una rutina de cuidado de la piel de la cara, pero la piel del cuerpo suele quedar en segundo plano.

Sin embargo, si queremos lucir una piel sana y bonita, merece la misma atención que la piel del rostro.
A continuación, veremos una rutina de cuidado corporal según nuestras necesidades y algunos trucos que nos ayudarán a mejorar su aspecto.
La importancia de cuidar la piel de tu cuerpo

La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo y su principal función es actuar como barrera protectora contra factores externos.
Durante el invierno, factores externos como las bajas temperaturas, el viento, la calefacción y el uso de agua muy caliente, dejan nuestra piel seca, sensible y apagada.
Una buena rutina diaria, nos ayudará a reparar daños y preparar la piel para el verano.
Establecer una rutina de cuidado de la piel del cuerpo, no solamente hará que esté más bonita, sino que nos ayudará a prevenir signos del envejecimiento, manchas solares…
Tips basicos para empezar a cuidar tu piel hoy mismo
Antes de empezar a hablar de cremas y productos específicos de belleza, debemos recordar que una piel saludable comienza desde el interior:
- Beber suficiente agua a diario para mantener una correcta hidratación.
- Seguir una dieta saludable rica en antioxidantes y vitaminas.
- Considera tomar algún suplemento si notas que pérdida de firmeza (como colágeno).
- Dormir suficientes horas favorece la renovación celular.
- Para que tu piel esté bonita y saludable, el mejor producto de belleza es usar un buen protector solar a diario en zonas expuestas.
¿Cómo tener la piel del cuerpo suave y bonita?

Establecer una rutina corporal de cuidado no solamente mejora el aspecto de la piel, sino que contribuye a tu bienestar emocional.
Recuerda la importancia del autocuidado en mujeres ocupadas, tips rápidos que puedes incluir en tu día a día.
Dedica unos minutos cada día al cuidado de tu cuerpo, y poco a poco tu piel estará más luminosa, hidratada y con un aspecto saludable, manteniendo a raya los signos de envejecimiento.
Higiene adecuada

El primer paso de una buena rutina de cuidados corporales empieza en la ducha, y es que lo principal es una piel limpia.
Utiliza un gel de baño adaptado a tu tipo de piel, ya que si tienes la piel seca o piel sensible, seguro que agradeces productos con ingredientes naturales sin sulfatos ni ingredientes agresivos.
Busca productos con aloe vera, manteca de karité o aceites esenciales nutritivos que te ayudarán a limpiar sin resecar y ayudan a mantener tu piel hidratada.
La duración del baño y la temperatura del agua también influyen:
- Evita el agua caliente y opta por agua tibia que mantiene la hidratación natural. Si puedes terminar la ducha con agua fría mucho mejor, te ayudará a estimular el flujo sanguíneo y a mantener tu piel más tonificada.
- No abuses de los baños o duchas demasiado largas.
Renovación de la piel mediante la exfoliación

La mejor manera de eliminar células muertas de la piel es mediante la exfoliación. Puedes usar un exfoliante corporal suave una o dos veces por semana según tu tipo de piel.
Hazlo mediante un suave masaje con movimientos circulares.
También te puede ayudar a mantener tu piel suave el cepillado en seco o dry brushing, además de ayudar a eliminar la celulitis y a la circulación.
Es una técnica que tiene muchísimas ventajas para tu piel y puedes añadirlo a tu rutina diaria, descubre más sobre los beneficios del cepillado en seco.

Este es mi cepillo corporal favorito, lo tengo desde hace mucho tiempo y me va genial.
Hidratación para una piel suave

Después de la ducha, con la piel ligeramente húmeda, es el mejor momento para aplicar tu crema hidratante. Es esencial usar una loción hidratante sea cual sea tu tipo de piel, al igual que sucede con la piel del rostro.
- Para piel seca, utiliza cremas con ingredientes naturales como manteca de karité, urea, aceites vegetales naturales (almendras, jojoba, aguacate, coco…). Puedes usar lociones tipo mantecas que son más untuosas.
- Para pieles normales una textura ligera es la mejor opción, ya que se absorbe fácilmente.
- Si tienes la pieles sensibles o piel atópica, busca productos específicos sin fragancias ni alcohol.
¿Cómo cuidar cada parte del cuerpo?
Todas las zonas de nuestro cuerpo no tienen las mismas necesidades. No es lo mismo hidratar unas manos expuestas al sol y al lavado constante que unas piernas que han estado todo el invierno bajo capas de ropa.
Por eso, es importante adaptar los cuidados a lo que necesita cada parte para lucir radiante siempre ¡vamos a descubrir cómo cuidar cada zona con eficacia!
Cómo cuidar escote y cuello

La piel de esta zona es fina y delicada, por lo que requiere unos cuidados similares al rostro.
La mejor manera de cuidar estas partes es aplicar las mismas cremas hidratantes que usas para la cara, especialmente si contienen ácido hialurónico, colágeno o vitamina C, lo que hará que se mantenga más firme y elástica.
Masajea siempre con movimientos ascendentes para mejorar la firmeza de la piel, y no te olvides poner una crema con factor de protección solar si llevas escote y queda al descubierto.
Cuida tus manos a diario

Nuestras manos están expuestas al frío, viento, sol, lavados frecuentes, productos de limpieza… Es una de las zonas del cuerpo más expuestas y que antes empiezan a mostrar signos de envejecimiento.
- Usa una crema específica para manos varias veces al día, lleva en el bolso y ten a mano en la mesita de noche.
- Aplica protector solar en el dorso de las manos para prevenir manchas.
- Utiliza guantes para tareas domésticas con productos químicos.
Pies, los grandes olvidados

En invierno suelen pasar desapercibidos, y nos acordamos de ellos cuando dejamos atrás botas y calzado cerrado, y toca sacar las sandalias.
- Aplica una crema nutritiva, insiste en zonas como los talones que suelen agrietarse fácilmente.
- Exfolia regularmente para eliminar durezas.
Tengo la piel del cuerpo bastante seca, y lo noto especialmente en piernas y pies con la calefacción en invierno. Desde que probé a aplicar este bálsamo de caléndula ¡mi piel ha cambiado por completo!
La aplico en talones y otras zonas secas como manos, codos, rodillas… Se nota desde la primera aplicación mucho más nutrida y sin agrietarse.
Piernas y glúteos

Para estas partes del cuerpo puedes elegir productos adecuados para tratar la celulitis, la elasticidad, reafirmar… Puedes ver más sobre cómo eliminar la celulitis.
Factor de protección solar

Sin duda, uno de los mayores causantes del envejecimiento prematuro de la piel son los rayos solares si no nos protegemos adecuadamente.
Creo que todas tenemos interiorizado el uso de protección solar cuando vamos a la playa o la piscina, incluso cada vez somos más conscientes de usarlo diariamente en el rostro en cualquier época del año.
Esto nos ayudará a prevenir arrugas, falta de elasticidad, evitar en la medida de lo posible el cáncer de piel y otros problemas cutáneos.
Entre los pasos básicos de cuidado corporal no podemos olvidarnos del protector solar para una piel radiante y con buena salud, así que aplica este producto en las partes de tu cuerpo que quedan expuestas.
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Ahora que va cambiando el tiempo y nos vamos preparando para el verano vienen muy bien estos tips María. No he probado nunca el bálsamo de caléndula para zonas de más roce. Lo haré. Siempre aprendo cosas nuevas en tus posts. Un abrazo 🤗
Ohhh cuídarse es lo más
Bss
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